La eliminación de cicatrices con láser es un procedimiento que se realiza con anestesia local y dura unos 30 minutos. El tratamiento con láser requiere de 3 a 6 sesiones (según los casos). Los ojos del paciente están protegidos por pantallas metálicas durante todo el procedimiento.
El médico pasa el láser sobre la piel afectada para eliminar la dermis. Esto reduce tanto la profundidad como la anchura de la cicatriz y, por tanto, su aspecto.