La blefaroplastia puede realizarse con anestesia local o general. Depende del número de párpados que haya que operar, del tipo de cambios que haya que realizar y también de las preferencias del paciente. La cirugía de párpados en Túnez suele durar entre 30 minutos y 2 horas. La duración de la hospitalización es de 1 día.
El cirujano comienza realizando incisiones, asegurándose de que queden ocultas en los pliegues naturales. De este modo se evita que las futuras cicatrices sean visibles.
Las incisiones cutáneas de los párpados superiores se ocultan en el pliegue situado a media altura del párpado (entre la parte fija y la móvil del párpado).
Las incisiones cutáneas de los párpados inferiores se sitúan de 1 a 2 mm por debajo de las pestañas. A veces pueden extenderse un poco fuera.
Es a partir de estas pequeñas incisiones que se elimina el exceso de grasa, músculo y piel. Una vez hecho esto, las incisiones se suturan con hilos muy finos. En el caso de una blefaroplastia inferior, también puede ser necesario un retensado de los párpados para tensar el margen del párpado inferior.